TRATAMIENTO DE LAS ADICCIONES
By: admin
Tags:
TRATAMIENTO DE LAS ADICCIONES
POR AMAR Y POR SALUD, NUEVO PODCAST DE BIENESTAR Y SALUD MENTAL CON HELENA TRUJILLO
Abordar el tema de la drogadicción desde el marco de la teoría psicoanalítica se diferencia de los abordajes y enfoques médicos, sociales y conductuales para la prevención y tratamiento de esta patología. La drogadicción es un síntoma que muestra la manera que tiene ese sujeto de relacionarse con el mundo. Las drogas, objetos y personas son utilizados como vía de escape de las exigencias de la vida desde mucho tiempo atrás.
No todo el que ha tenido oportunidad de tomar alcohol, cocaína, tabaco… contrae por ello una «adicción» a esas sustancias. Un estudio más preciso demuestra por lo general que esos narcóticos están destinados a sustituir -de manera directa o indirecta- el goce sexual faltante, y cuando no pueda restablecer una vida sexual normal, cabrá esperar con la recaída en el uso de dicha sustancia.
Hay drogadictos que viven por y para el consumo de su “sustancia”, como hay hombres y mujeres que, como niños, no pueden desligarse afectivamente de la relación primitiva con la figura materna y demandan y demandan y nunca pueden puntuar esa constante búsqueda de satisfacción, no pueden realizar un trabajo, una transformación para producir otro tipo de vínculos y satisfacciones, siempre parciales.
TAMBIÉN PUEDES ESCUCHAR EL PODCAST EN SPOTIFY
En la actualidad son muy malas las drogas, el psicoanálisis aconseja no drogarse porque, en una época era lindo drogarse porque las drogas eran lo que decían: “quiero alucinar” te tomabas un alucinógeno, “quiero tranquilizarme” te tomabas un cigarrillo de marihuana… En cambio, ahora, las drogas producen efectos contradictorios como la sociedad capitalista. Ahora los propios Estados están implicados en el narcotráfico y son, de alguna forma, sostenedores del tráfico de sustancias estupefacientes que, principalmente, consumen hombres y mujeres en edades productivas, es decir, entre los 16 y 55 años. Es decir, es una forma de desentenderse de personas a las que los Estados tendrían que ofrecer formación, opciones de desarrollo de su carrera profesional, propuestas de reciclaje profesional y adaptación a un mercado laboral cambiante.
La mayoría de los tratamientos de las adicciones fracasan porque no abordan los procesos inconscientes del paciente, no basta con la interrupción del consumo de la sustancia, la estructura adictiva del paciente, que busca, busca y busca algo que tape su demanda, generará una nueva caída en la adicción a esa u otra sustancia o persona.
La adicción es un complejo mecanismo psíquico que utiliza cualquier cosa, desde la Coca-cola, que es una sustancia, hasta los clavos porque como siempre están duros los clavos y el sujeto tiene impotencia genital, entonces ama los clavos porque están siempre parados, siempre duros. Eso es una adicción. Adicción a las personas, es la adicción más grande del universo, adicción a las personas. ¿Por qué hace cincuenta años que vive con ese hombre si la maltrata? Porque soy adicta, tendría que responder la mujer y el tratamiento que se le haría sería muy beneficioso para ella. ¿Por qué vive con esa mujer que lo maltrata? Porque soy un adicto.
El psicoanálisis nos enseña que no es que estemos enfermos por algún trauma físico o psíquico, sino que estamos enfermos porque tenemos una manera de concebir lo humano, el saber, la enfermedad, etc. Nada existe en el hombre que no esté tocado por el lenguaje. La drogadicción es un síntoma que muestra la manera que tiene ese sujeto de relacionarse con el mundo. Y también un modo en el que la sociedad está pensando a los individuos que la integran.
Unos buscarán la droga para potenciarse intelectualmente, otros laboralmente, otros creativamente, otros sexualmente, etc. Utilizan la sustancia como «quitapenas», procurando escapar del peso de la realidad, refugiándose en un mundo propio que ofrezca mejores condiciones para su sensibilidad. La adicción es también una forma de establecer pequeños vínculos sociales alrededor del nombre droga, esto sucede porque están faltando los proyectos alternativos, esta faltando el proyecto constitutivo, el proyecto personal que hace que una persona se produzca y goce desde la salud.
El psicoanalista tomará a la adicción como cualquier otro síntoma, de cualquier otro paciente, en tanto formación del inconsciente. Su escucha se dirigirá hacia lo verdadero, el deseo inconsciente. No le importan los hechos sino la manera en que el paciente los vive, los relata porque el psicoanálisis es la cura por la palabra en tanto el inconsciente está estructurado como lenguaje. Se trata de que cada paciente pueda, a partir de su propio imaginario, construir un camino.
Droga puede ser cualquier cosa: el vino, la familia, el sexo, la religión, el amor, el trabajo, la patria, el dolor, el dinero, la madre y … también la cocaína. Lo que se utiliza como droga viene a colmar, calmar una ansiedad. El sujeto se escapa así de plantearse su vida, su futuro.
El drogodependiente es un sujeto que tiene mil excusas para seguir drogándose y ninguna excusa para dejar la droga.
La familia juega también un papel importante en las personas con esta problemática. En muchas ocasiones deberíamos preguntarnos ¿quién es el adicto?: el alcohólico, con su adicción al alcohol o la familia del alcohólico con su adicción al alcohólico.
La drogadicción tiene un carácter compulsivo inconsciente, que lleva al sujeto a consumir esa sustancia que le es imprescindible para su existencia. Un impulso lo obliga a ello, no sabe vivir de otra manera.
Es el psicoanálisis el que brinda este estatuto de sujeto psíquico al adicto y, como tal, la cura será por la palabra. Le hará posible el pasaje desde esa relación sin falta, sin corte en la cual cree que toda necesidad será calmada, al lenguaje.
Si te has sentido identificado/a con el contenido de este post, si quieres ayudarte y que te ayudamos a tener tu propio camino de vida, contacta conmigo o reserva una cita, es el primer paso de ese camino que hay para ti sin enfermedad.